miércoles, 26 de marzo de 2014

Como empezó todo

Un día normal me desperté por la mañana con una extraña sensación en los pies. Ha medida que me iba desperezando me iba fijando más en ella, se me habían dormido. No hacía más que notar un hormigueo, como cuando te quedas dormido sobre una parte del cuerpo. Pensé que habría dormido en una mala postura o algo por el estilo y me dije que, al levantarme y moverme se me iría pasando.